
Una mañana se despertó Gregorio Samsa
y se encontró rodeado de una legión de sacerdotes
que le endilgaban la extremaunción,
mientras un coro de ángeles revisaba confiscatoriamente
sus propiedades.
Y Gregorio,
que gozaba de cabal salud,
se dio cuenta,
con terror póstumo,
que no soñaba
y que así era la vida contemporánea
al amparo de las leyes de Dios.
*Texto extraído de la revista proceso de esta semana.
3 escupitajos:
jaja muy bueno
En proceso sí, pero quien firma?
Esta muy curado.
Besos :*
monstruo de su laberinto:
yep
Parcel Stereo:
En proceso, sí. Como notas de la redacción.
Sección 'Por mi madre, Bohemios'
xxx&o
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