La incontinencia de la memoria




En otro momento aunque anterior, pero en esta misma situación, me hubiera jactado de mi memoria pulcra y sedentaria, no obstante de sencillísimo acceso. En los últimos días de pensamiento, algo distinto he notado; sólo llevo el registro de ciertas cosas y personas: Sólo de las personas a las que amo, y a las que quizá odio, y a las que no tolero, y de las que no doy medio pito por ellas, pero y definitivamente, no registro la gente que su nombre empieza con i. Las cosas, ésas todas son ambiguas en importancia.